miércoles, 26 de enero de 2011

bombos y platillos



















Esta entrada es para agradecer a los que han tenido algo que decir de la versión impresa de los Bastonazos.

Acá pueden leer las reseñas:
-La de Andrés
-la de otro Andrés,
-la que salió en Radar,
-y la que salió ahora en Los Inrockuptibles

Les dejo también el prólogo que hizo mi amigo Diegogue:


Ambos están sentados en un café, él junta fuerzas para preguntarle algo, mientras ella habla de temas anodinos. Luego de dudar por un momento él le preguntaba a ella si aun lo ama, y ella calla con una sonrisa culpable, entonces él intentará conocer a otras mujeres, buscará olvidar, y lo que vendrá a partir de ahí será un viaje, una historia de encuentros y desencuentros en la que nuestro protagonista sin nombre emprende una tortuosa educación sentimental, fragmentada en brevísimos episodios de pocas viñetas, en los que seguiremos a un personaje anónimo, del que no sabemos mayor cosa, pero con el que podremos congeniar rápidamente, mientras añora, ama, anhela, se enamora y se desenamora, es un caballero, es un patán, es dulce, es tierno y es cruel.
Bastonazos de ciego de Andrezzinho, una tira en internet, un web comic que empezó como una prueba, un experimento, fue adquiriendo regularidad, y una descomplicada continuidad, en la medida en que lectores de varios países fueron leyendo los episodios que se publicaban en un blog, a la manera de folletín electrónico. En el blog podían leerse por separado, pero ahora, leídos de corrido forman una historia con la que es imposible no identificarse, incluso sin ser lector habitual de cómics, y es que Los bastonazos son un relato sobre las relaciones afectivas contemporáneas, sobre el miedo al compromiso, y a la soledad. El lenguaje es minimalista, los personajes están dibujados con una línea sencilla, amable, los encuadres a veces son increíblemente sencillos, otras veces son verdaderos planos cinematográficos, algunas páginas son diagramadas con limpieza, otras son abiertamente experimentales, pero lo que priva es la historia que se nos cuenta, por encima de la belleza del dibujo y la elegancia de las palabras. Lo que tenemos entre manos es una obra sofisticada, pero para nada frívola.
Bastonazos de ciego es una narración ecléctica, incómodamente grata, dolorosamente divertida, y, leída en libro, un placer exquisito.

Diegogue



Muchas, muchas gracias a todos, espero que ya se hayan acabado los ejemplares en Argentina, en Colombia quedan unos poquitos y los tengo yo. El que quiera, que avise.